Llamado desde las sombras

Pasos Audaces en esta semana

“Pero el Señor dijo a Samuel: No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.”
(1 Samuel 16:7).

Todavía tengo muy presente el momento en que, por primera vez, sentí el llamado genuino hacia el ministerio pastoral. Al principio, ser pastor no estaba en mis planes. Pero Dios comenzó a mover las piezas de mi corazón durante un verano que pasé en Francia, siendo apenas un adolescente. Trabajaba lavando platos en un restaurante, y en mis descansos solía llevar bajo el brazo el libro La búsqueda de Dios de A.W. Tozer. En esos momentos de quietud, entre el ruido de la cocina y el murmullo de las calles, algo profundo comenzó a despertar en mí. No era una emoción pasajera, era un llamado. Dios me estaba mostrando que tenía un propósito para mi vida que iba mucho más allá de lo que yo había imaginado.

Me recuerda la historia de David en 1 Samuel 16, cuando el profeta fue enviado por Dios a ungir al próximo rey de Israel. Todos esperaban a alguien con presencia imponente, alto, con apariencia real. Sin embargo, Dios dijo: «El Señor no mira lo que la gente mira… el Señor mira el corazón» (v. 7). Siempre me ha intrigado que David no fuera considerado desde un inicio. Ni siquiera estaba en casa cuando Samuel llegó a visitar. Mientras sus hermanos desfilaban ante el profeta, David estaba en el campo, cumpliendo una tarea humilde y poco reconocida. David cuidaba de ovejas . . . pero en ese lugar apartado, en el anonimato, Dios lo vio y estaba forjando el corazón de un rey.

Después de ser ungido, David no entró inmediatamente al palacio para ocupar el trono. Más bien, regresó a pastorear ovejas. Ahí es donde se formó realmente. En la soledad, protegió al rebaño, escribió salmos y aprendió a confiar solo en Dios. Incluso tocó música para calmar al rey Saúl (1 Samuel 16:23), desarrollando silenciosamente la autoridad espiritual que un día necesitaría como rey. Quizás tú también te encuentres en una temporada así: silenciosa, en sombras, o aparentemente sin importancia. No subestimes esos momentos. Dios sigue moldeando a sus grandes líderes en las sombras. Lo que parece pequeño a los ojos del mundo, a menudo es una preparación sagrada en las manos del Creador.

Después, llegó el momento de David al entrar al campo de batalla para enfrentarse al gigante Goliat. Su propio hermano, Eliab, cuestionó sus motivos. Incluso soldados veteranos dudaron de él, pero David había estado con Dios en los lugares tranquilos. Su confianza y valentía no provenían de títulos ni armaduras, sino de una relación profunda con el Dios que lo había preparado en secreto. Y ese es, justamente, el desafío que quiero dejarte hoy: Sé fiel en tu presente. Permanece firme en lo que Dios está haciendo en ti, aunque nadie más lo vea todavía. No necesitas el reconocimiento público para ser llamado. Solo tienes que decir que “sí”. El mismo Dios que vio a David en el campo, entre las ovejas, también te ve a ti. De seguro, te está preparando para algo más grande de lo que puedes imaginar.

Oración:

Señor, gracias por ver más allá de lo que otros ven. Gracias por llamarme incluso cuando me siento invisible o incapaz. Ayúdame a ser fiel en las cosas pequeñas, a confiar en ti en los momentos de sombra y a ser valiente cuando me llamas. Dispón mi corazón para todo lo que has preparado para mí. En el nombre de Jesús, amén.

Para más Pasos Audaces, visita este enlace. 

Información sobre el ministerio de Mark

Esta semana marca el inicio de un nuevo semestre académico en el Instituto Bíblico Moody de Chicago, así como en el Seminario Teológico Moody de Michigan y Chicago. Dar la bienvenida a un alumnado completo es una respuesta directa a nuestras oraciones. Valoramos profundamente tu continua oración por nuestro personal docente al comenzar este semestre de otoño. Mi oración es que capacitemos fielmente a estos estudiantes para que sean valientes embajadores de Cristo en una cultura que nos presiona por todos lados. No te equivoques: ¡estamos en una batalla espiritual por los corazones de esta generación! Por eso, nos apasiona mucho formar líderes arraigados en la Palabra de Dios y preparados para servir donde Él los llame.

Si tú, o alguien que conoces, siente un llamado al ministerio o simplemente deseas profundizar tu fe y comprensión bíblica, te invito a explorar lo que Moody ofrece. Visita www.moody.edu para obtener más información sobre nuestros programas y cómo puedes ser parte de esta comunidad transformadora.

¡Dona Ahora!